[dropcap size=big]C[/dropcap]uando celebramos el Día de Muertos, celebramos la resistencia de nuestras tradiciones y ancestros. Tradiciones que nos arraigan a nuestros antepasados, tradiciones que sobrevivieron a la conquista y las olas de opresión sistématica y cultural que siguieron.
El Día de Muertos es una práctica arraigada en la identidad indígena. Las prácticas tradicionales y prehispánicas de los Mexicanos del centro y sur de donde provienen todas las interpretaciones modernas. Para gente Zapoteca como yo y mi familia, mantener nuestras tradiciones de muertos es una obligación con nuestros antepasados, un sentimiento de honor, un sentimiento de amor eterno que no conoce fronteras ni fin.
Dia de Muertos, Dia de Los Muertos y su traducción directa Day of the Dead, no es 'Halloween Mexicano.' Mi tía Libe, la orgullosa guardiana de las tradiciones, me platica que en realidad el día se llama Dia de Los Muertos Fieles porque solo los leales regresan de visita.
En Oaxaca, estas fechas se encuentran entre las fiestas más importantes del año. Los campos son pintados de color violeta y naranja con flor de muerto, como cempasúchil y caléndulas mexicanas (Marigolds en inglés). Las frutas y semillas maduras se traen de las vastas regiones de Oaxaca. El Pan de Muerto es el pan más popular en los puestos de los mercados.
¿Por qué la obsesión por los muertos ahora? Porque es una celebración en vida pensar de la muerte en una forma positiva.
Tradicionalistas como mi tía, se enorgullecen de preparar todo para su altar y ofrendas hechos por ella misma. Muertos es estar en familia, visitando hogares con ofrendas o en el panteón (cementerio). Las comunidades y familias ahorran su dinero durante todo el año y se preparan por meses para esta gran celebración para honrar la visita de sus muertos. La directora de UNAM LA, Paula de Gortari, me mostró un libro de altares en los estados rurales de Guerrero y Oaxaca las imágenes que exhibieron en el evento de Hollywood Forever Dia de Los Muertos de 2018, la mayor celebración de Muertos en los Estados Unidos. Me muestra y comenta sobre la imagen de un altar hermoso y detallado en una casa sin techo. A mi no me sorprende, es un testimonio visual de la importancia de estas fechas, la práctica sagrada de la conmemoración.
Estas tradiciones nos acompañaron a Los Ángeles desde Oaxaca, por eso el Día de Muertos siempre ha tenido un gran valor aquí. Sabemos que nuestros muertos nos visitan dondequiera que estemos. Cuando construimos nuestros altares, agradecemos a nuestros seres queridos por mostrarnos las habilidades cuando estaban vivos. Les hacemos saber que las tradiciones no se han desvanecido y que nuestro amor y respeto por ellas no ha muerto, ni siquiera en este país extranjero. Es por eso que mi padre pasó años perfeccionando su receta de pan de Muerto y recibe las caritas de muerto (figuritas de cara hechas con almidón de maíz) enviadas desde Oaxaca. Es tan importante cada detalle.
A partir de la influencia de nuestras prácticas indígenas y patrones de inmigración, El dia de Muertos se ha convertido en una parte integral de la cultura en esta gran ciudad. Las raíces de eso se remontan a 1972, cuando Self Help Graphics comenzó a organizar talleres y su Noche de Ofrendas. Fue impulsado por el Movimiento Chicano y la celebración fue un sentido de orgullo. También fue visto como un acto de desafío contra la asimilación y la opresión sistématica. Las celebraciones fue una forma en que los chicanos se conectaron con su herencia mexicana, esa fue una forma para expresarse.
Cuatro décadas después, en la actualidad aquí en Los Ángeles, el Día de Muertos son páginas tras páginas de eventos y tutoriales de maquillaje de calaveras en Youtube que comienzan en octubre y van mucho más allá del 2 de noviembre.
Es justo que algunos argumentan que el kitsch de calaveras ha ido demasiado lejos y que han devaluado la práctica con celebraciones sobresaturadas y comercializadas. ¿Por qué la obsesión por los muertos ahora? Porque es una celebración en vida pensar de la muerte en una forma positiva. Solo recuerden que la popularidad de la fiesta de nuestros ancestros indígenas tomó mucho para llegar aquí. La cultura no es un disfraz ni una oportunidad de marketing. Las celebraciones que podemos realizar hoy llegaron gracias a las adaptaciones a la colonización por las que los indígenas tuvieron que luchar y hasta morir.
La indigenidad está de moda (En Vogue), como debe ser, porque es una cosa hermosa. Me gustaría recordarles a todos que la apreciación y la apropiación son muy diferentes. Respeten las culturas y prácticas indígenas. Una familia sin techo en Oaxaca no guarda todo el año para honrar a sus seres queridos para que una Becky vaya como una calavera de azúcar mexicana a una fiesta de Halloween. Por favor, comprendan lo sagrado que son estos días de conmemoración para muchos de nosotros que hemos estado celebrando esta festividad durante generaciones.
This article was originally published on L.A. Taco last year in English and translated by Martha Morales, the mother of the author. Her bio is below:
Mi nombre es Martha Morales y primeramente me siento muy orgullosa de mis raíces mexicanas llenas de cultura y tradición (Oaxaqueña 100%). Yo, como tantas otras personas que nos encontramos lejos de nuestra tierra, especialmente en estas fechas, sentimos una gran nostalgia. Pero seguimos arraigados a nuestras tradiciones. No importa la distancia o que tan lejos estemos seguimos fielmente con nuestras costumbres y tradiciones y eso nada—ni nadie—nos lo puede cambiar.